Tras recorrer 175,1 kilómetros después de una primera etapa de contrarreloj por equipos, el maillot rojo se mantuvo en tierras holandesas y en el equipo Jumbo Visma, ya que Robert Gesik le cedió la prenda a Mike Teunissen.
Una llegada caótica en la que cayó Alejandro Valverde a 700 metros de meta, sin gravedad para el ciclista murciano, que lamentaba su suerte al verse atrapado por el «hostión», según comentó en caliente. Mientras unos se miraban las heridas, el irlandés Bennett alzaba los brazos como vencedor.
El velocista del Bora se filtró en cabeza y en una llegada apretada impuso su poderío con un tiempo de 3h.49.34, a una media de 45,8 km/hora, por delante del danés Mads Pedersen (Trek) y del belga Tim Merlier (Alpecin Deceuninck).
La cuarta plaza fue para el nuevo líder, el neerlandés del Jumbo Visma Mike Teunissen, un corredor que fue líder en el Tour 2019 tras ganar la primera etapa en Bruselas. Gesink pasó el testigo a un compañero y a un compatriota. Alivio para el equipo. Le siguen en la general el italiano Edoardo Affini y el holandés Sam Oomen. Con Roglic como líder real en la cuarta plaza, el ecuatoriano Richard Carapaz es séptimo a solo 13 segundos y Carlos Rodríguez primer español, noveno, con el mismo tiempo.
Valverde al suelo
El decorado cambio a medida que se acercaba la meta situada en la Ciudad Universitaria de Utrecht. Ya se rodaba a 50 por hora y los equipos andaban buscando su estrategia para lanzar a su candidato al esprint.
El Ineos pasó al frente para evitar lo que provoca pánico en los corredores: las caídas. Los hombres de Carapaz y Carlos Rodríguez tensaron el ritmo alargando la forma del pelotón, donde los hombres del UAE, BikeExchange y Alpecin buscaban la mejor posición para cuando se desaatara la jauría por la victoria.
UAE mandó a Marc Soler en avanzadilla para colocar a Ackerman, momento en que se instaló el descontrol, ya dentro de la zona de seguridad de los 3 km antes de meta. Hubo nervios, dudas y maniobras que terminaron en accidente.
A 700 metros de la línea hubo montonera11. Atrapado Valverde. «Se han caído delante y no lo he podido evitar, no ha sido un día tranquilo, como lo demuestra el hostión. Creo que no es nada», tranquilizó el «Bala».
Unos al suelo, otros a por la victoria. Sam Bennett pescó en río revuelto. El ciclista de Wervik amplió su palmarés, que ya incluye 4 etapas en la Vuelta, además de 3 en el Giro y 2 en el Tour de Francia, en un total de 58 victorias en su palmarés. Ahora vestido de verde, el irlandés respira tranquilo. «Sin ganar, otros objetivos no sirven de nada», dijo.
Este domingo la tercera etapa se disputará con salida y meta en Breda, la jornada más larga de la presente edición con 193,2 km de recorrido.
Agencia EFE