El programa de ciclismo en carretera debe revisarse a fondo, según el presidente de la UCI, David Lappartient, tal y como informa Het Nieuwsblad, sobre todo en lo que se refiere a la escasa cantidad de carreras de nivel World Tour que hay en el mes de febrero, en el inicio de temporada.
Lappartient habla de una «evolución, no una revolución» en el calendario WorldTour a partir de 2026. «Queremos el menor número posible de solapamientos. El UAE Tour se celebra hoy al mismo tiempo que la Omloop het Nieuwsblad. Ambas competiciones pertenecen al UCI World Tour. Queremos evitarlo en la medida de lo posible. Lo comparo con el ciclismo femenino».
«En el ciclismo femenino empezamos de cero. Eso es mucho más difícil con los hombres, que tienen 130 años de historia. El Tour de Francia siempre se correrá en julio. Igual que las clásicas se correrán, por supuesto, en primavera o en otoño. O que el Tour de Flandes y la París-Roubaix siempre se correrán cerca el uno del otro, simplemente porque es mejor para los ciclistas. Hay que respetarlo».
Lappartient quiere más carreras WorldTour en febrero. «Actualmente sólo tenemos el UAE Tour y la Omloop het Nieuwsblad como competiciones WorldTour en febrero. ¿Por qué no planificar más carreras en ese mes? Entonces pienso en partes del mundo donde actualmente no somos fuertes. Hoy no tenemos carreras World Tour en Sudamérica o África. Aunque hay posibilidades allí. También en África, sí. Quién sabe lo que nos deparará el Mundial de Ruanda el año que viene».
El presidente de la Unión Ciclista Internacional había confirmado en noviembre del 2023 que estaba de acuerdo con las propuestas del proyecto de reforma One Cycling que traería al ciclismo internacional una importante reorganización del calendario del WorldTour.
Uno de los principales cambios sería la celebración de la París-Roubaix y el Tour de Flandes en el mes de octubre, tal y como se hizo en el año 2021. “La pandemia de COVID-19 nos obligó a reorganizar el calendario. Las audiencias fueron fantásticas”, comentó en declaraciones entonces al medio francés DirectVelo.
Estos posibles cambios de fechas no tendrían lugar antes de 2026 y afectarían, únicamente, a las carreras de una semana y a las clásicas. “Tenemos que organizar el calendario WorldTour de forma que reduzcamos nuestras emisiones y no nos desplacemos de una parte a otra del planeta cada mes”, añadió Lappartient. Las fechas de las pruebas ciclistas seguirían un flujo natural para evitar desplazamientos innecesarios.
La UCI tiene un objetivo claro: reducir las emisiones y la huella de carbono de los equipos y las pruebas ciclistas en un 50% para el año 2030. Para ello, Lappartient apuesta por el uso de vehículos eléctricos, ya sean los coches y los autobuses de equipo y evitar, además, los desplazamientos largos. “En lugar de ir cinco o seis veces al año a un país, es mejor recoger las carreras en un periodo de tiempo. Las semanas de las clásicas son magníficas. Los corredores están tres semanas en Flandes y no se mueven. Es bueno para todos”, sugirió el presidente de la UCI.