El ciclismo ecuatoriano va creciendo, paso a paso, por todos los frentes y uno de ellos es el ciclismo femenino, que a pesar de las muchas dificultades y carencias que aún tiene que afrontar, va ganando más visibilidad y competencias.
Uno de los equipos que invirtió en lanzar una plantilla femenina esta temporada es el Movistar BestPC, que a inicios del año presentó a las dos corredoras que iniciarían la incursión de esta escuadra en el ciclismo femenino: Ana Vivar y Marcela Peñafiel, ambas de solo 18 años en ese momento. Unas semanas más adelante se unió a la nómina Natalia Vásquez, de 17 años, para completar una de las escuadras más prometedoras del ciclismo ecuatoriano.
Hace unos días el equipo anunció por sus redes la renovación de las tres corredoras para la temporada 2023 y la incorporación de la ciclista carchense Camila Vega, igualmente menor de 18 años, que convertirá al tridente en un cuarteto que genera expectativa para el próximo año.
Vega cuenta en su palmarés con títulos nacionales en categoría preinfantil e infantil y una importante experiencia, a pesar de su corta edad, que incluye haber competido en carreteras colombianas, haber sido seleccionada ecuatoriana en Juegos Bolivarianos y varias actuaciones destacadas en las competencias de la I Copa Federación Ecuatoriana de Ciclismo, a lo largo de este 2022. La carchense también participó en la histórica I Vuelta Femenina al Ecuador celebrada hace pocas semanas, con el equipo Saitel, donde conquistó un top 10 en la etapa reina.
La llegada de Camila Vega es una continuación en la línea del equipo de apostar casi exclusivamente por el talento joven, en lo que se refiere al equipo femenino. Apuesta que a pesar de ser de largo plazo ya va dando sus frutos como la cosecha en la Vuelta a Colombia Femenina, en la que Ana Vivar peleó la clasificación sub 23 hasta las últimas etapas y fue 10ma en la general final.
En el calendario ecuatoriano, Vivar ha sido una de las dominadoras, y las tres corredoras han tenido grandes actuaciones dentro un pelotón femenino que en Ecuador aún es reducido pero que va creciendo a grandes pasos, precisamente con la llegada de la siguiente generación de corredoras.
En el punto en el que se encuentra el ciclismo del Ecuador es importante que las nóminas femeninas más importantes, que son las de los equipos profesionales, se consoliden y vayan sumando corredoras talentosas quienes podrán así acceder a mayor estabilidad, recursos para su entrenamiento y mayor exposición en carreras dentro y fuera del Ecuador.
Hace mucha ilusión que estos proyectos se fijen en corredoras jóvenes, que con el apoyo adecuado pueden tener un gran futuro y llegar lejos en el ciclismo a nivel internacional.
Fuente: www.ciclismointernacional.com